Sagardi Castellana: un asador TOP

El grupo Sagardi es todo un referente de la cocina vasca fuera de Euskadi con implantación en varios paises como Inglaterra, Argentina, Portugal, Holanda o México. En España tiene presencia en Sevilla, Ibiza, Valencia, Barcelona y Madrid donde tenemos 4 locales, dos restaurantes Sagardi y dos bares de pinchos Orio y Golfo de Bizcaia.

Con ganas de Asador, de carnaza de la buena, elegimos el Sagardi de Castellana y local lujoso, de grandes mesas bien separadas, con un servicio exquisito y unos platos que quitan el hipo. Una carta con alubias, pimientos, atún, bacalao, merluza y carne, con su oda al Txuletón.

Empezamos por el aperitivo, unas txistorras cortesía de la casa y continuamos con un txangurro a la donostiarra, uno de los platos más tradicionales de la gastronomía vasca donde el buey de mar es vaciado con paciencia y su carne cocinada con cebolla y otros ingredientes para luego servirlo dentro de su cuerpo con pan rallado por encima. Esto, tan sencillo, fue un plato de alta gastronomía hace años.

El segundo entrante fueron unas anchoas bermeanas. Ojo, aviso a navegantes, en los locales vascos cuando indican anchoa se refieren al pez, al boquerón, y no a su preparación en salazón como lo conocemos en otros lugares. Este plato fue sublime, te traen las anchoas a la mesa y las preparan en aceite frito y con ajo a tu gusto.

Seguimos con la carne, verdadero objetivo de nuestra visita. En la carta hay dos opciones: Vaca vieja a 60€ el kilo o vaca premium madurada (maduración mínima de cuatro semanas) a 110€ el kilo. Optamos por la primera opción, un kilo de carne. Y, a pesar de lo que parece en la foto que pinta a un poco quemada, rondaba la perfección.

De postre una tarta de manzana a compartir llevó la cuenta, para cuatro, a unos 35€ PAX. Eso si, de beber solo agua y un par de copas de vino "Debajo de la escalera", un Rioja alavés de toque joven pero que pegaba muy bien con todo.

Un asador TOP, algo subido de precio pero que merece la pena si eres un amante de la carne. En su planta inferior, tiene una zona de bar de pintxos que prometemos que visitaremos algún día!