De tapas por Cuenca

Hace unos años nos reservamos un par de días para visitar Cuenca, su Ciudad Encantada, sus casas colgadas y cómo no, degustar sus tapas.

Este año hemos vuelto a comprobar la salud de sus locales y el ambiente. Siguen ofreciendo tapa gratis, normal, sin florituras, al estilo de lo que hacen en Madrid. A partir de ahí puedes pedir raciones de modo desenfadado. También ha mejorado, como en casi toda España, el tema de los vinos y sus variedades. En blancos antes había prácticamente solo "De la tierra" o "Diamante"; ahora existe una mayor oferta y es factible pedir un verdejo sin que te pongan cara rara. El tapeo sigue estando centrado en par de zonas:

Plaza Mayor (¿por qué lo llaman Plaza si no es una plaza?)
- Los Arcos. En nuestra primera visita, de entrada, nos pusieron una tapa de jamón york con queso. Nos debieron de ver mala cara y al preguntarnos si no éramos de allí, nos lo cambiaron por una tapa de morteruelo. En la segunda visita nos volvieron a tratar muy bien pero el ambiente estaba de bajón (domingo noche) y la tapa brilló por su ausencia. Para compensar y porque no las habíamos comido aún tomamos unas migas ruleras y, bueno, no eran demasiado deslumbrantes. Lo completamos con unos huevos rotos, cinco blancos y un semidulce por 33,60€

- Mesón San Juan Plaza Mayor. Aquí si hubo tapa de cortesia, mini-san jacobos y torreznos. Que acompañamos con 7 refrescos, un vino blanco y un tinto de verano (22,60€).

- La Mangana. Ambiente "clásico", del de toda la vida y nos deleitaron con un buen vino de rueda.

Calle San Francisco
En su momento habíamos leído que era la calle de vinos por excelencia. Es la que siempre os recomendarán pero no esperéis nada espectacular. Pequeña, en la primera visita nos sorprendió mucho cuando comprobamos que solo estaba compuesta por 8-9 bares y encima uno de ellos era una franquicia (Taberna de los 100 Montaditos). No ha cambiado mucho, ya no están los 100 Montaditos, ni el Buffalo, un pseudoamericano, con nulo ambiente de tapeo y vinos de la tierra. Tampoco encontramos abierto uno de los más famosos y que habíamos visitamos en el primer viaje: La Ponderosa (hemos oído que cierra sábado y domingo aunque nosotros fuímos un viernes). Era un clásico, pero a nuestro parecer, estaba venido a menos. De hecho, estuvo recomendado por la guía Michelin, Mal servicio, mala tapa (aceitunas) y vino muy regular de la tierra. La carta de raciones no estaba mal, pero a las 9 de la noche no les quedaban algunas, como el ajoarriero.

La calle aguanta aunque de los 9 locales que se ven solo hay 7 abiertos. Algunos de los que probamos fueron:

- Mesón José. Gran ambiente y buen local. La afluencia de público lo constataba. Ahora está renovado, más aséptico pero con gran carta. Disfrutamos de unos zarajos bien ricos (4€) y de un plato que no es fácil de encontrar pero que os recomendamos: rabo de toro frito. Las piezas más pequeñas del rabo, bien fritas para roer y disfrutar (8€).

- Mesón Fidel: pequeñito pero de los famosos de la calle. El servicio algo saturado pero como era un recomendado entramos a la caza de productos típicos: ajo arriero y morteruelo. Raciones por 9,5€. El primero algo frío y soso pero el morteruelo estaba delicioso y reconcilió a nuestros acompañantes con este plato.

- Mesón Rodríguez, repetimos. En nuestro primer viaje fue el local que más nos gustó, el descubrimiento de la noche. Un bar de los de siempre, con un camarero de los de siempre y ambiente cutre. Como debe de ser. En cada ronda, una tapa y cuando llegó la hora de cerrar, bajaron las luces, echaron el cierre y nos siguieron atendiendo sin perder la sonrisa. A la hora de pagar, 6 vinos y 1 zarajo, 10 €. Ahora ya no es tan barato (2,2€ las cervezas y refrescos, 1,8€ los mostos o 2,8€ los vinos blancos) pero sigue siendo un gran local y sigue estando muy bien atendido. De tapa de cortesía patata ali-oli que completamos con un lomo de orza muy rico, bien preparado a pesar de ser un trozo gordo y con apariencia de seco, muy bueno. También un mojete, o moje, una ensalada de tomate, huevo duro y aceitunas negras


Mirador del Castillo
La zona del Castillo no la conocíamos, se nos escapó en el anterior viaje y es francamente bonita. A un lado, una vistas preciosas de la ciudad y la hoz del Huecar. Al otro, una zona de restauración con terrazas y con buen ambiente a la hora del vermú; aunque tengan pinta de restaurantes para comer (ya que en todos ellos ofrecen menús del día) te puedes, simplemente, sentar a tomar algo.

Para comer elegimos el María Morena, uno de los más elegantes y con una carta especializada en carnes, arroces y algún plato típico que no nos resistimos a probar, morteruelo (riquísimo) y ajo arriero, además de Ferrero Roche de morcilla. De segundo probamos varias de sus carnes: Hamburguesa de gamo, chuletillas, chuletón y cochinillo. Todo correcto, con materiales de calidad y bien preparados.
El servicio es algo incostante, bien intencionado pero olvidadizo y a veces atolondrado pero aún así comimos muy a gusto. Tiene un carta amplia de vinos, a buenos precios la mayoría. Y la cuenta, sin postres y con un par de botellas de vino sale por unos 35€ PAX

Este segundo viaje ha supuesto una mejora en la percepción que teníamos del lugar. Sigue siendo pequeño y con la oferta algo corta (y en según que momentos inexistente) pero es cierto que en momentos se ve muy bien ambiente y que la calidad de sus locales ha mejorado.

Comentarios

  1. Está claro que no encontrasteis los lugares adecuados...De la calle San Francisco el mejor es el Fidel, su tortilla esta muy buena, aunque sus croquetas son aún mejores...al lado de san francisco esta una taberna llamada el bodegón...carne a la brasa y bien de precio, el único problema que no se puede reservar pero las raciones son abundantes. Muy cerca también de la sanfran (asi se llama la calle San Francisco para nosotros) está el 5º pecado, es mas de tapas de diseño pero con dos cañas cenas. Y arriba del 5º pecado está el Roco, mi favorito, bar de gente joven, las patatillas son indescriptibles ah! y bien de precio. Si volveis teneis que preguntar por la bodeguilla de vasilio, un sitio decorado con muchas fotos de cuenca a principios de siglo XIX. Otro que no podeis dejar escapar es el Darling y su codillo junto con las manitas de cordero, la relación calidad-precio es muy buena también. Y así hay muuuuuucho más bares (y estos por la parte "nueva", que en la plaza mayor, y sí, es PLAZA, hay más del mismo tipo del Mangana). No se si preguntasteis a la gente, pero seguro que os hubieran informado bastante mejor de ir a los sitios en los que estuvisteis...

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    1. Gracias por la aclaracion se nota que eres conquense y amas a tu tierra.
      Existen bares geniales en Cuenca y para todos los gustos y bolsillos,sin fuda El Bodegon genial!! Y " en la plaza" sitios muy buenos psra todos los gustos y bolsillos, solo hay que preguntar.
      Una conquense

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    2. También está EL SOTANILLO donde hay raciones tipicas y muy ricas.

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  2. Muy bueno tu articulos de experiencias vividas en tus excurciones es una muestra par quienes quieren realizar un viaje y tener en cuenta muchas cosas y las indicaciones que das son realmente buenas.
    saludos.
    Deivis

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  3. Perdono pero el ajo arriero no se come caliente y as ido poco por cuenca para k hables así

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